La incertidumbre que vivimos se extiende a todas las esferas de la vida. Las consultas de psicología están llenas de personas que temen perder su trabajo y desarrollan su actividad en empresas que viven un presente difícil y un futuro incierto.

Nada en el mundo volverá a ser igual y hoy, más que nunca, las empresas, si quieren pervivir tienen que ser viables, rentables, generar impacto y confianza y tener un modelo de negocio que responda y se adapte constantemente a las nuevas necesidades del mercado. Las firmas necesitarán unas señas de identidad que las diferencien de la competencia, un plus en sus servicios y su forma de trabajar que las permita fidelizar a sus clientes y abrir constantemente nuevas posibilidades de negocio, y eso solo lo conseguirán si sus trabajadores, además de ser grandes profesionales, son personas felices.

La felicidad de los trabajadores, clave del éxito corporativo.

El bienestar y el equilibrio emocional de los profesionales determinará la diferencia entre las empresas que triunfan y las que fracasan. 

Solo si contamos con personas motivadas, comprometidas y con emociones positivas tendremos éxito en nuestras empresas, mejoraremos los niveles de productividad, reduciremos el absentismo, retendremos el talento y seremos capaces de reaccionar ante las nuevas necesidades que surjan.

Empresas con bienestar emocional.

Una organización sana, es una organización con bienestar emocional, que se preocupa por mejorar de manera activa y continua la salud física y emocional de las personas que interactúan en ella, haciendo más saludable tanto el entorno de trabajo, como los hábitos personales fuera del entorno laboral. Una firma saludable busca la puesta en marcha de acciones centradas en las necesidades de los trabajadores.

Salud emocional y empresarial.

Este nuevo modelo de organización proporciona a sus empleados las herramientas necesarias para una mejor gestión de sus emociones y del clima laboral, previene el estrés tanto físico y emocional y contribuye a crear una mejor relación entre todos sus miembros.

Las empresas con futuro deberán promover la flexibilidad, la felicidad, el liderazgo compartido, la autenticidad, la diversidad de género y cultura…; valorando y desarrollando a las personas. 

Herramientas de los profesionales ante esta nueva realidad (*)

Las competencias tradicionales no serán suficientes en el nuevo entorno. Nuevas realidades exigirán nuevas habilidades y destrezas por parte de los trabajadores y de los cuadros directivos.

Los profesionales necesitarán:

- Reiniciar y reaprender a conocerse sin filtros, identificar las emociones y estar bien con uno mismo.

- Trabajar su flexibilidad, creatividad y valentía.

- Promover tensión positiva, para alcanzar tensión productiva. El equilibrio entre la razón y la emoción. El autocontrol positivo.

- Generar automotivación y reilusión. Solo la motivación interna nos permitirá superar entornos volátiles, inciertos o ambiguos. 

- Cuidar nuestro bienestar emocional a través de nuestra salud integral: sueño, alimentación y ejercicio saludable. Identificar los hábitos que nos desgastan.

- Proactividad en la gestión del tiempo: encontrar las agujas de nuestro reloj.

- Potenciar el liderazgo emocional para lograr el fin de los silos (grupos cerrados).

- Desarrollar nuevas metodologías para nuevos entornos: Agile y Lean, Scrum o Kanban.

- Crear una nueva comunicación constructiva: las emociones no viajan por la red.

(*) Rescate emocional para la nueva realidad empresarial.

Programa desarrollado por CEOE Campus con Apertia Consulting.