Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) sumó en 2018 su quinto título de MotoGP y el séptimo de su carrera deportiva con 25 años, lo que le permite continuar escribiendo una página de oro en la Historia del Mundial de motociclismo, merced a todos sus récords de precocidad.

El ilerdense, quien en Cheste no pudo terminar el Gran Premio al sufrir una caída, debido a las malas condiciones en que se disputó la prueba como consecuencia de la lluvia, cerró su campaña con nueve victorias y, a pesar de sus cuatro ceros, su peor resultado del año acabó siendo la tercera plaza en la República Checa, donde le superaron las dos Ducati en un épico final.

El año no empezaba demasiado bien para él tras la victoria de Dovizioso en Qatar y su polémica decimoctava posición en Argentina, pero en la línea del piloto de Cervera, todo menos perder los nervios, por ello que en las siguientes tres carreras, Austin, Jerez y Le Mans, encadenase tres victorias consecutivas, hasta que en Mugello, se quedó a la puerta de los puntos por una caída.