Las mejoras incorporadas al servicio de transporte urbano de la ciudad de Soria en el último año han surtido efecto y el número de viajeros creció en el conjunto de 2019 en un 8,33%. En concreto el incremento de usuarios se evidenció a partir de mayo y la tendencia al alza ha sido constante hasta finalizar el año. De hecho, el aumento respecto al año anterior en estos ocho meses ha oscilado entre el 15,72% de diciembre y el 26,37% que anotó octubre, lo que ha compensado las caídas que se experimentaron entre enero y abril, que se movieron entre un -6,31% en marzo y el -16,3% en abril.
En términos absolutos, al finalizar 2019, según los datos proporcionados por el Ayuntamiento de Soria, se contabilizaron 364.116 usuarios del servicio, 27.242 más que en 2018. Es decir, que la media de usuarios en el total de las cinco líneas operativas es 997,5 viajeros diarios, 102 más de media al día que en 2018.
Las mejoras más visibles que se han añadido al transporte urbano de la capital soriana son las nuevas marquesinas, así como las tecnologías que las soportan que han dotado de mayor eficacia y eficiencia al servicio.
En este sentido, cabe recordar que se puso en marcha el Sistema de Ayuda a la Explotación (SAE) que consiste en la geolocalización y seguimiento de la flota de autobuses en tiempo real y, por lo tanto, permite gestionar las posibles incidencias que surjan en los trayectos.
web, app y paradas. Este sistema se sustenta en la información que se ofrece al ciudadano tanto en la web, como en la app oficial y en los diferentes paneles informativos instalados en las paradas más relevantes de la ciudad que facilitan información de horarios, estimaciones de paso del autobús en tiempo real y advierten de posibles incidencias o avisos que puedan afectar al usuario.
Además de los canales por correo ordinario o por correo electrónico, las cuentas oficiales en redes sociales (Twitter) permiten una comunicación bidireccional entre los viajeros y los operarios del servicio.
Asimismo, la flota está equipada con wifi gratuito y en los últimos meses han instalado nuevas marquesinas en los intercambiadores de mayor afluencia en las calles Santa María y Ramón y Cajal.
También se han incluido puntos USB que permiten cargar aparatos electrónicos, una medida que se adoptó tras la propuesta que se realizó en este sentido en los Presupuestos Participativos.
«Los cambios han sido una apuesta. Al principio costó, pero se hicieron en base al estudio previo, y cada vez la gente se acostumbra más a coger el bus», destaca la concejala de Obras, Servicios y Medio Ambiente, Ana Alegre. Los resultados se evidencian con el vuelco en las estadísticas, si se comparan los cuatro primeros meses de 2019 con el resto del año.