Hay que remontarse a septiembre de 2017 para recordar la primera adjudicación de la presa del Río Mayor para la comarca de Tierras Altas. Eran 3,7 millones de euros pero nunca se ha terminado. Los vecinos de la zona están hartos, "esto no avanza y deberían buscar una solución", comentan desde San Pedro Manrique, "aquí pagamos el agua, pero luego no lo tenemos". Una situación "que debe cambiar radicalmente", concluye otro vecino.
Pero la resolución no será sencilla, "si se judicializa esto se puede alargar más de los que queremos", asegura Miguel Latorre. Desde la subdelegación del Gobierno señalan a una culpable, la empresa adjudicataria. "la situación la ha provocado la UTE formada por Sarrión y Aglomerdos Numancia". Considera que si esto sucediese, "sería un retraso para nosotros inasumible".
Ofrecen tres soluciones: que la empresa se encargue tras un modificado aprobado por la Abogacía del Estado, que renuncie o resolver el contrato administrativamente, "poder licitarla o encargarlo a una entidad propia de la administración para acabar cuanto antes porque es muy necesario", afirma Latorre.
Pueblos como San Pedro Manrique alertan que al menos dos proyectos empresariales han pasado de largo por este problema, "al menos un par de casos conozco", asegura el alcalde, Julián Martínez. El edil teme que se prolongue mucho más en el tiempo, "tres o cuatro años se puede dilatar si esto sigue así". Mientras tanto el inicio de la obra seguirá esperando a su culminación.