Soria sin fronteras

Henar Macho
-

El soriano Samuel Casado impulsa un proyecto de turismo activo por la provincia a través de rutas de ciclismo de montaña en la página web 'Caminos de Frontera', donde ofrece vídeos, guías y mapas de recursos

Soria sin fronteras

A Samuel Casado no le ha hecho falta una pandemia ni varias semanas de confinamiento para despertar su vena deportista ni para valorar los parajes de la comarca que ha recorrido palmo a palmo con su bicicleta. Este aficionado al ciclismo de montaña y natural de Soliedra acaba de estrenar una página web, Caminos de Frontera, aunque su proyecto de promoción cicloturista comenzó hace tres años en su canal de Youtube con vídeos caseros de trayectos por la comarca. 

Poco a poco la idea ha ido creciendo y ganando adeptos, lo que le ha hecho ver la necesidad de estructurar y canalizar todo ese contenido. «He visto en grupos de Facebook de cientos de miembros que la gente se mueve mucho por su cuenta, buscan rutas diseñadas o se las crean ellos mismos y yo, después de siete años trabajando en la Asociación de desarrollo rural Tierras Sorianas del Cid y conociendo los tremendos recursos que tiene Soria y que no están bien aprovechados, vi que se podían explotar para el cicloturismo», detalla. 

COMUNIDAD CICLISTA. Y no le falta razón. La zona de Almazán goza de una amplia afición a este deporte. Y más si cabe ahora, apunta, ya que «la bici se va a convertir en un símbolo de la libertad que no hemos tenido todos estos meses y ojalá mucha gente se quede enganchada».

En la web se pueden encontrar las guías, en español e inglés, y tracks de cinco rutas circulares de entre 120 y 310 kilómetros, con conexiones entre ellas, y pronto se sumarán otras más largas. Además, cuenta con un mapa de recursos para descubrir el territorio con información de interés como alojamientos, espacios naturales, monumentos patrimoniales, estaciones, oficinas de turismo, tiendas, refugios… 

«La idea es hacer deporte pero fijándose en los sitios por los que vas pasando: atalayas, bodegas, lagares, palomares, molinos...», destaca.

Los trayectos son asequibles para un perfil físico medio y se incluirán también rutas adaptadas -más llanas y cortas por la cuenca del Duero- para pasar un día en familia. «El ciclista más puro que va con alforjas tiene rutas de mínimo dos días, pudiendo hacer entre 50 y 70 kilómetros por jornada, hasta de cinco días», añade. 

Samuel estudia ahora varias fórmulas para hacer crecer su proyecto y buscará la participación de establecimientos y ayuntamientos. Todo ello para ampliar el abanico de servicios para los cicloturistas «aunque las rutas están diseñadas para asegurar que haya algún tipo de establecimiento cada ciertos kilómetros», insiste.

Pese a que no descarta comercializar la idea, por el momento lo que más le preocupa es que funcione. Algo que está testando en redes sociales donde «han entendido y apoyado» sus rutas a dos ruedas desde Almazán, el kilómetro cero de Caminos de Frontera. «Una ubicación estratégica, con trenes y autobuses desde Madrid y otras capitales, es una oportunidad para atraer gente», concluye.