En enero de 2020, la farmacéutica Moderna ya contaba con la secuencia completa de la proteína Spike (necesaria para poder general vacunas de tipo ARNm) del SARS-Cov-2. A partir de ahí comenzó el proceso de creación de la vacuna, que finalizó un mes después, antes incluso de que se oficializara el comienzo de una pandemia mundial. Así lo contaba hoy Juan Andrés Rivera en las jornadas sobre 'Vacunas, respiradores. La acción colectiva' en Diálogos para el Día Después.
Un largo proceso de pruebas y aplicación de la vacuna en humanos, que ha concluido con la llegada al mercado más de 300 millones de dosis de Moderna. Aunque Juan Andrés afirma que siguen trabajando en próximas vacunas para poder adaptarse a las mutaciones del propio virus. Con un 94% de efectividad, esta vacuna en tiempo récord es el resultado, en palabras de Juan Andrés, de "la colaboración colectiva".