La malaria aviar amenaza al quebrantahuesos en los Pirineos

EFE
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La subida de las temperaturas por el cambio climático facilita que el mosquito portador de la enfermedad pueda ascender a otras altitudes e infectar al ave, que carece de defensas para combatirlo. En Aragón han registrado la muerte de cinco animales

Gerardo Báguena (c) explica como se transmite la enfermedad. - Foto: Javier Cebollada

El parásito causante de la malaria aviar que transmiten algunos mosquitos ha causado la muerte de cinco quebrantahuesos en el Pirineo aragonés.

Otros tres han estado expuestos a las picaduras y transportan anticuerpos en su sangre, un efecto del cambio climático que favorece que estos mosquitos amplíen su periodo de actuación y de cría y también la colonización.

Este es el principal resultado de un estudio llevado a cabo en el marco de un proyecto del equipo de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) y la Fundación Iberdrola, en colaboración con el Gobierno de Aragón y las Universidades de Zaragoza y Castilla La Mancha, que se ha presentado este miércoles en la capital aragonesa.

La malaria aviar amenaza al quebrantahuesos en los PirineosLa malaria aviar amenaza al quebrantahuesos en los Pirineos - Foto: CENTER FOR INFECTIOUS DISEASE RE

El presidente de la FCQ, Gerardo Báguena, ha explicado que el estudio quería confirmar la sospecha de que un simple mosquito era capaz de matar a un quebrantahuesos, una hipótesis que "ya está confirmada" y que abre un nuevo campo de preocupación para las especies amenazadas, ya que Aragón es la región de Europa con mayor población de quebrantahuesos reproductor.

La sospecha de la presencia de malaria aviar en un quebrantahuesos se tuvo hace unos siete años, ha relatado, en un nido en el que se analizó un pollo que no tenía masa muscular y dio positivo. Fue tratado in situ con un antiparásito y logró sobrevivir porque se trató a tiempo, pero sigue siendo paciente de malaria.

En el caso de que no se coja a tiempo, el efecto del parásito es rápido y el animal puede morir en pocas semanas, ha advertido, al tiempo que ha añadido que en el Centro de Cría del Quebrantahuesos se han implementado medidas profilácticas y, pese a ello, el pasado año entró un mosquito que picó a un quebrantahuesos.

El estudio que se llevó a cabo, según ha explicado Úrsula Hoffel, investigadora del IREC/CSIC, ratificó en una primera fase la presencia de mosquitos transmisores de estos parásitos en zonas del Pirineo donde antes no eran habituales y, en una segunda, que están presentes en la época de reproducción del quebrantahuesos y en la que están los pollos en los nidos, ha insistido.

De hecho, se han encontrado estos mosquitos por encima de 1.500 metros de altitud en Benasque, según Hoffel, quien ha incidido en que "en el momento en que hay mosquitos, hay malaria" y en que los mosquitos "ya estaban", pero se han adaptado al cambio climático.

Antes tenían un periodo de actividad y cría más limitado y ahora, con los inviernos más benignos y el aumento de las temperaturas, pueden ampliar este periodo y su capacidad de transmitir la malaria, así como colonizar territorios en los que antes no tenían presencia.

El estudio ha analizado más de 800 mosquitos, moscas negras y jejenes capturados en 116 noches de trampeo, y de los 150 analizados el 20,6% contenían hemoparásitos del género Plasmodium, que provoca la malaria.