Detectar la soledad de los mayores es ya una prioridad

Ana Pilar Latorre
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En el 14,8% de los hogares vive una persona mayor sola, un colectivo que supone el 6% de la población total de la provincia. Las instituciones y el tercer sector ya actúan

Detectar la soledad de los mayores es ya una prioridad - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez.

El 6% de los habitantes de Soria es mayor de 65 años y vive solo, hablamos del 14,8% del total de los hogares de la provincia, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esto no quiere decir que 5.500 mayores vivan en soledad, porque muchas veces es una opción personal y no una obligación (no tienen familiares o personas cercanas que les puedan atender), pero para las administraciones y el tercer sector es importante detectar a tiempo estos casos para poder atenderles debidamente y ofrecerles ayuda en su día a día. Las noticias sobre personas que fallecen en su domicilio y nadie les echa de menos en mucho tiempo disparan las alarmas. Las áreas de servicios sociales y atención a la tercera edad ya diseñan medidas específicas, como la creación de redes vecinales para localizar a estas personas y poder ofrecerles ayuda. 

La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, dio este jueves un paso más para la creación de la ‘Red social para la sensibilización y detección de situaciones de especial vulnerabilidad y fomento del buen trato’, ya que se constituyó el grupo de trabajo «sobre la soledad mal gestionada entre las personas mayores». Está formado por Femur, la Red de Jubilados y Pensionistas, Cruz Roja, Cermi (Cocemfe, Plena Inclusión y Once), Eapn Coceder, Fademur, Cáritas y la Dirección General de Salud Pública de la Junta. 

La estructura de trabajo consistirá en «analizar la realidad para poder hacer un pequeño diagnóstico de la misma, establecer un sistema o mecanismo de derivación de los casos que puedan conocerse por cada una de las entidades y agentes y determinar acciones conjuntas que se pueden llevar a cabo en el marco de colaboración».El objetivo es «sensibilizar y preparar a profesionales para detectar y actuar en estos casos y determinar también acciones preventivas para evitar estas situaciones».

Una vez definido el contenido y el proceso a seguir cuando se detecten, se establecerá un protocolo de adhesión a la red social de entidades del tercer sector. Por ello, el grupo de trabajo ya tiene información para un primer análisis sobre los trabajos y definiciones que existen sobre este asunto a nivel nacional y europeo, como un primer diagnóstico. 

La red, en la que se integrarán, además de entidades del tercer sector, asociaciones vecinales y otro tipo de establecimientos como farmacias o comercios de proximidad, buscará también nuevos problemas a los que se enfrentan las personas mayores para darles respuesta y llegar, sobre todo, a los mayores que residen en el medio rural.Por ejemplo, se ofrecerán actividades que permitan una mayor socialización en casos de soledad o se detectarán situaciones de violencia de género y cualquier otra forma de maltrato hacia personas mayores, que se derivarían a los servicios sociales o al Ministerio Fiscal (en personas con capacidades limitadas). En colaboración con entidades y colectivos que participan en ella, se llevarán a cabo «medidas formativas de cara a conseguir una mayor sensibilización y capacitación de los profesionales y se realizarán acciones de carácter preventivo sobre estas posibles situaciones, fomentando el buen trato». Esta plataforma, según fuentes de la Junta, «permitirá actuar con mayor celeridad en muchos casos que sean detectados».

a nivel local. El Ayuntamiento de Soria también trabaja en la misma dirección. Aunque es una ciudad pequeña y los casos se pueden detectar más fácilmente, ya no haya tanto espíritu de vecindad que conocen mejor los más mayores y que se mantiene aún en muchos pueblos.El concejal de Acción Social, Eder García, confirma que se está «moldeando» la red de apoyo vecinal 'Nos cuidamos' (punto del apartado de igualdad social del programa electoral del PSOE) para combatir la soledad, consistente en «la creación de redes vecinales y de solidaridad y el fomento de espacios para la convivencia y la conversación». 

El concejal apuesta por implicar a la sociedad, en un proyecto de ensayo-error para estudiar lo que funciona bien, como los centros de la Barriada o el Gaya Nuño, o las actividades y Aulas de la Tercera Edad o las iniciativas intergeneracionales, como los cursos de cocina en la Barriada este verano o la visita a los huertos, que podrían girar en torno a temas como los juegos populares. Son cuestiones que se detectan través de las trabajadoras sociales de teleasistencia o ayuda a domicilio, el Equipo de Gobierno y el Departamento de Acción Social. Sobre todo, hace hincapié en los beneficios que aporta a los mayores que «formen parte activa de la sociedad».

«Que esas personas que viven solas salgan a la calle y se cuiden, evitando el sedentarismo que agrava las situaciones de dependencia y creando lazos de amistad con otras personas que se encuentran en la misma situación es muy positivo», añade el concejal animando a estas personas a «salir de casa, tener la mente ocupada y hacer cosas. Lo secundario es que mejoren en costura, origamis, memoria o gimnasia de mantenimiento». Cree que en Soria debe animar a la gente el hecho de poder ofrecer ayuda a los vecinos de la comunidad, a que pregunten por el vecino o la vecina, una costumbre que se puede recuperar en los más jóvenes, que no tienen esa costumbre de padres o abuelos. «Es una cuestión de civismo y hay que recuperarla», añade haciendo referencia a la participación en esta iniciativa de vecinos, comercios, farmacias, la propia policía local, asociaciones... Eder García destaca la labor de los voluntarios, como los del programa de acompañamiento de Cruz Roja, ya que el colaboró hace tiempo en el mismo, «la ayuda servía también para echar un rato y una conversación que necesitaban».

La atención a las personas de edad avanzada es una prioridad para Ayuntamiento y Diputación Provincial y, para ello, prestan servicios como ayuda a domicilio y teleasistencia, desde los que también se pueden detectar casos de soledad mal gestionada, como apuntábamos. El Ayuntamiento tiene otros programas enfocados a combatir esa soledad como las Aulas de la Tercera Edad, que permiten un envejecimiento activo; los centros cívicos (como el Gaya Nuño con más de 1.000 usuarios o el de la Barriada recién reformando), que son puntos de encuentro y actividad y convivencia intergeneracional; o las distintas actividades culturales o deportivas para mayores. 

 Desde la Diputación Provincial, Eva María Muñoz, responsable del área de Servicios Sociales, asegura que sus planes están  «en consonancia» con la Junta en este tipo de actuaciones porque «se trata de programas cofinanciados». Se lleva a cabo una intensa labor a través de los Centros de Acción Social (Ceas) en las diez zonas de la provincia y a través de los servicios de teleasistencia y ayuda a domicilio, principalmente. 

«Los Ceas, como la parte más cercana, conocen las necesidades de la población y detectan este tipo de problemas.La soledad es un tema que nos preocupa por la problemática de la provincia», explica insistiendo en las iniciativas con las que cuentan de envejecimiento activo y que incluso a veces se acercan los técnicos a sus hogares si no pueden salir a realizar los talleres de memoria, por ejemplo. «Los talleres de memoria son importantes, pero a veces no tanto como las relaciones sociales». 

En reuniones con otras diputaciones sí que se ha planteado crear, aparte de lo que hay, un programa específico para actuar contra la soledad. «Sería algo innovador», concluye la diputada. Un objetivo a tener en cuenta en la provincia y que hay que apuntar es el apoyo a los mayores para que puedan continuar viviendo en sus hogares, acercándoles allí los servicios. La provincia de Soria presenta una especial problemática, la población envejecida y dispersa, pero instituciones y tercer sector intentan que los servicios lleguen a todos estos hogares unipersonales.

acompañamiento. Es algo que remarca también Marianela Sánchez, del programa de mayores de Cruz Roja. En el mismo destacan las acciones de acompañamiento que llevan a cabo más de 200 voluntarios en distintos puntos de la provincia. Se les ofrece ayuda puntual (ir al banco o al médico, hacer papeles, coger el autobús...) o continuada, para lo que se desplazan a los hogares e intentan pasar tiempo con estas personas y ayudarles en distintas tareas, aunque en muchas ocasiones necesitan más apoyo psicológico que físico. Observan que la tele (sobre todo la local), la radio y el móvil hacen mucha compañía a estas personas que viven solas, más en el medio rural.