Los 30 vecinos que viven en Barcones llevan desde el pasado 18 de octubre sin línea de teléfono fijo, una situación que desgraciadamente no es nueva en la localidad y por la que los vecinos llevan luchando cerca de dos años, cuando una intensa nevada ya les dejó sin telefonía fija. "El motivo por el que ahora nos hemos quedado todos sin teléfono es que hay unos árboles cerca del poste que nos abastece  y cuando hace viento se generan interferencias", explica el alcalde de la localidad, Pablo Casado. Para dar solución a ese problema, hace dos años se instaló un nuevo poste pero no está dotado de luz, por lo que no funciona. "Telefónica dice que Endesa no les da suministro; no sabemos si se están pasando la pelota", lamenta Muñoz. 

Además, según la información que han recibido desde Telefónica, en la localidad no hay más capacidad para dar de alta nuevas líneas, por lo que, si alguien lo desea así, tendría que esperar a que alguien se diera de baja, algo que sucedería si por ejemplo uno de los vecinos falleciera. "Es indignante que te digan eso", lamenta Pablo Muñoz, el alcalde del municipio. Ahora, en plena pandemia, temen más que nunca volver a quedarse incomunicados y esa situación se prolongue durante el invierno.