Soria actualiza el mapa de ruido

Ana I. Pérez Marina
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La adjudicación del contrato para la actualización del Mapa de Ruidos de la capital está prevista para mediados de diciembre

42.000 desplazamientos

El 14,74% de la población soriana de la capital está afectada por el ruido. Al menos así se desprende del gráfico de 2012, correspondiente al Mapa  de Ruido de Soria, que en breve se someterá a su revisión obligatoria. El Ayuntamiento de Soria licitó a finales de octubre el contrato para la actualización del citado mapa y planes de acción en materia de contaminación acústica por 20.107,44 euros (más IVA). La tramitación está en fase de requerimiento de documentación de las dos ofertas que han concurrido a esta convocatoria, tal y como informan desde el Consistorio. Así, a mediados del mes de diciembre se prevé que esté adjudicado, por lo que los ocho meses que contempla el pliego de prescripciones técnicas para la actualización del mapa comenzarán a contar a partir de la firma del contrato, de forma que el nuevo documento estará a finales de 2019.

El Mapa Estratégico de Ruido de Soria data del año 2012 y la propuesta de Planes de Acción en materia de Contaminación Acústica salió adelante en 2013. Hace un año, la Junta de Castilla y León aprobó una subvención de más de 540.000 euros para la revisión de los mapas de ruidos de los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes, ya que la Ley de Ruido de Castilla y León vigente insta a la modificación cada cinco años a partir de su aprobación.

En este lustro la radiografía de la ciudad ha variado de forma sustancial, principalmente por el plan de peatonalización de Soria. La norma de referencia para la elaboración de los mapas estratégicos de ruido dicta unos requisitos mínimos sobre el cartografiado acústico y hace hincapié en el tráfico rodado, el tráfico ferroviario, los aeropuertos y los lugares de actividad industrial, incluidos los puertos. En la redacción de estos mapas no se contemplan otros emisores acústicos propios de las actividades domésticas, el comportamiento vecinal o la actividad laboral.

avisos vecinales. Sobre este tipo de contaminación acústica que no recogen los mapas de ruido, en lo que va de año la Policía Municipal dela capital ha realizado 11 actas de medición con sonómetros, la mayoría en establecimientos públicos y por la noche. El total de denuncias tramitadas son 16 y se hallan en distintas fases de expediente, aunque todavía no hay ninguna sanción económica.

Y es que es el tráfico rodado lo que «constituye el foco de ruido más importante en el municipio de Soria», según el texto de 2012. En la ciudad confluyen lo que se conoce como travesías, que son las carreteras N-234 (Burgos-Zaragoza), N-122 (Valladolid) y N-111 (Madrid-Logroño).

El documento de hace seis años refleja la vías con «mayor conflicto acústico» en función de los cuatro indicadores que se tienen en cuenta  (medida de presión acústica) durante el día (Ld), la tarde (Le), la noche (Ln) y la jornada completa (Lden).

calles afectadas. El mapa vigente que será objeto de revisión en los próximos meses indica que las calles más afectadas, que superan los niveles sonoros en un intervalo entre cinco y diez decibelios, son Caballeros, Campo, Callejón del Pregonero, Estudios-Bernardo Robles, Ferial, García Solier, Betetas, avenida de Navarra, Nicolás Rabal, Sagunto, San Benito, San Juan de Rabanera, San Lorenzo, Santa María, Santo Tomé y Tejera. En un segundo nivel, con una superación de entre cero y cinco decibelios, se encuentran la carretera de Ágreda, las calles Albacete, Alberca, Alfonso VIII, Almazán, Cardenal Frías, Caro, Clara Campoamor, avenida de la Constitución, Cortes de Soria, Cuesta Dehesa Serena, Dos de  Mayo, Duques de Soria, Eloy Sanz Villa, Eduardo Saavedra, Paseo del Espolón, Francisco de Ágreda, Fray Melchor García Navarro, Fuente del Caño, Fueros de Soria, García Solier, Gaya Nuño, plaza Jurados de Cuadrilla, Las Casas, carretera de Madrid, plaza Mariano Granados, avenida Mariano Vicén, Merineros, Mesta, Obispo Agustín, Postas, Retógenes, Rota de Calatañazor, San Agustín, San Hipólito, San Martín de Finojosa, Santa Bárbara, Tirso de Molina-Hospicio, avenida de Valladolid, calle Valonsadero, Venerable Palafox y Zamora.

Los hospitales y los centros educativos son edificios especialmente vulnerables al ruido, por lo que en las vías con mayor contaminación acústica se encuentran la Escuela Oficial de Idiomas (calle Estudios) y el CEIP La Merced (Santo Tomé). En el resto de calles afectadas se localizan otras 17 instalaciones educativas consideradas como edificios sensibles.

exposición acústica. El sonido se vuelve dañino a los 75 decibelios y doloroso alrededor de los 120 decibelios. En ningún caso, según el documento de 2012, los resultados obtenidos respecto al ruido provocado por el tráfico rodado en la ciudad superan estos niveles. De hecho, solo el 1,71% de la superficie total analizada (32,8 kilómetros cuadrados) se halla en la franja de entre los 70 y 75 decibelios, mientras que el 79,41% está por debajo de los 55 decibelios, mientras que el resto del territorio está entre 55 y 75 decibelios. Por ejemplificar lo que suponen estas medidas, entre 30 y 50 decibelios se considera bajo, comparable al sonido de las cañerías de una casa o un frigorífico. Entre 55 y 75 decibelios ya es un ruido considerable: un aspirador genera 65 decibelios y una calle con mucho tráfico puede llegar a los 75, pero también una lavadora o un televisor a un volumen elevado. Es decir que el 20,59% del territorio de Soria se sitúa entre esos márgenes, la mitad entre soporta entre 55 y 60 decibelios. Hay que matizar que estos porcentajes responden al indicador medio que computa las 24 horas del día.

En cuanto a los resultados obtenidos para el ruido debido al tráfico ferroviario no se presentan, debido a que no existe superficie expuesta a más de 55 decibelios a causa de la baja frecuencia de trenes que circulan por el municipio. Respecto a la contaminación acústica de las actividades industriales, el 99,4% de la superficie de Soria está expuesta a menos de 55 decibelios.

En conjunto, el 88,66% de la superficie está expuesta a ruidos no supera los 61 decibelios de media a los largo de una jornada, por lo que puede considerarse una ciudad de baja contaminación acústica.

En relación a la población expuesta, el 85,25% soporta menos de 66 decibelios de media en 24 horas, mientras que el resto (14,74%) soporta por encima de esa barrera. En este punto hay que matizar que por debajo de 55 decibelios de media está el 59,46% de la población. 

para medir. El pliego para la contratación de la actualización del mapa del ruido prevé al menos 160 mediciones, de las que 90 serán de corta duración (15 minutos) y 20 de larga duración (48 horas), además de otras 50 para poder caracterizar la potencia de emisión acústica de las zonas industriales del municipio. El conteo de vehículos se realizará como mínimo en las vías evaluadas en el anterior Mapa Estratégico de Ruido y en los nuevos trazados víarios dentro del suelo urbano y urbanizable. Por lo que las conclusiones, como consecuencia de la peatonalización del centro de la ciudad y también de la expansión de algunos barrios de la ciudad, como Los Royales, en estos seis últimos años, variarán de forma importante, a priori, respecto al último documento.