Una cadena humana con distancias de seguridad desde la plaza Mariano Granados hasta la de El Rosel y San Blas, pasando por la Plaza de las Mujeres ha sido la imagen del Día contra la Violencia de Género más atípico que se recuerda en Soria. Sin embargo, las circunstancias marcadas por la pandemia no han impedido que decenas de mujeres hayan querido participar en una jornada que sirve para recordar a las víctimas de esta lacra social. Muchas de las asistentes han coincidido en la necesidad imperante de educar con perspectiva de género y fomentando valores como la igualdad para evitar que sigan aumentando las cifras de mujeres maltratadas o asesinadas por sus parejas. 

Durante este año, desde los colectivos de apoyo a las víctimas afirman que no han aumentado los casos, y eso se debe al confinamiento durante los meses de primavera: para aquellas mujeres bajo una orden de protección, el aislamiento domiciliario ha sido un 'salvavidas'. "Los maltratadores no han podido acercarse a ellas, y eso ha sido positivo", ha manifestado Pilar de la Viña, presidenta de la Asociación Antígona.