La falta de trabajadores compromete a las empresas sorianas

A.I.P
-

Desde FOES y la Cámara de Comercio advierten de la situación crítica que viven los empresarios, ya que no encontrar mano de obra ralentiza su producción e impide desarrollar su actividad con fluidez

La falta de trabajadores compromete a las empresas sorianas - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez

La buena noticia de la gradual reducción del desempleo en la provincia, con una tasa de paro del 6,57%, tiene su contrapartida: las empresas están asfixiadas por la falta de trabajadores. Hay que matizar que, evidentemente, el trasfondo de este escenario está escrito por la pérdida de habitantes y el envejecimiento implacable de la población soriana que condiciona la actividad económica. Así las cosas, tanto desde la Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES) como desde la Cámara de Comercio de Soria advierten de que la supervivencia empresarial peligra en muchos casos y, desde luego, el crecimiento del tejido empresarial está comprometido por esta circunstancia de escasez de trabajadores disponibles para cubrir determinados puestos. Un contexto que corroboran empresarios y autónomos consultados por El Día de Soria que, además,  evidencian que es una problemática que ya no afecta solo al sector servicios, sino que se extiende a la construcción, la industria, la agricultura y la ganadería. Y, por supuesto, si de lo que se trata es de encontrar personal cualificado, la situación se complica aún más.

«Los problemas para contratar determinados perfiles profesionales suponen un serio quebradero de cabeza a las mercantiles sorianas porque limitan su productividad y condicionan su competitividad», afirma el presidente de FOES, Santiago Aparicio. De hecho, pone el acento en que empresas consolidadas de la provincia «se están planteando el cierre porque no encuentran trabajadores», un problema que se recrudece si las firmas operan en el medio rural, donde se une la falta de vivienda para nuevos pobladores.

Según el Observatorio de FOES del mes de abril, en la actualidad la carencia de mano de obra es el problema que más preocupa en las empresas sorianas, «por cuanto estrangula su capacidad de crecimiento» y pone en jaque su continuidad. Y es que siete de cada diez sociedades sufren dificultades para cubrir sus ofertas de empleo.

«Hemos tocado suelo. Es muy complicado. Yo mismo tengo pedidos parados y no encuentro trabajadores para mantenimiento o con conocimientos de mecatrónica [...] Hay casi 600 parados menos que al inicio del año. Pero no solo es el paro, a esto se suma un absentismo brutal, como nunca ha habido. Y mucho viene por las listas de espera de la sanidad por las mutuas», sostiene el presidente de la Cámara de Comercio, Alberto Santamaría.

En concreto, Santamaría se refiere a trabajadores con patologías traumatológicas que acumulan bajas laborales de más de un año por la tardanza en obtener un diagnóstico y, por consiguiente, el tratamiento ajustado a a su dolencia. «Esto es consecuencia de la ralentización del sistema sanitario», reitera.

Por su parte, el representante de FOES pone de relieve que la ausencia de masa laboral en la provincia también afecta al traspaso de pequeños negocios, que cierran por la jubilación de sus titulares y no encuentran quien quiera hacerse cargo de ellos.

soluciones. «Habrá que mirar un cambio de sistemas productivos, de subcontratación, fomentar la especialización... Hay que abrir la formación reglada a la gente que ya está trabajando. Hay mucha gente muy comprometida con el trabajo y muy productiva pero que tienen dificultades porque les falta esa formación. También buscar fuera... Hay que abordar esta problemática en toda su magnitud», sopesa el dirigente de la entidad cameral.

En este sentido, el presidente de FOES asegura que «no entiende» cómo desde las administraciones y los partidos políticos «no se han adoptado ya medidas de suficiente calado» para afrontar esta situación que, a medida que pasan los años, se extenderá a otros territorios del país.

«Hace diez años, Soria era el desgraciado paradigma de la despoblación. Hoy, provincias con muchos más habitantes enarbolan la bandera de la pérdida de población y piden medidas que no han llegado ni siquiera a Soria con la contundencia que permite la ley, caso de las ayudas de funcionamiento, aplicadas con porcentajes tímidos que no serán suficientes para frenar la pérdida de habitantes y, con ellos, el cierre de negocios y empresas, y la caída de nuestro PIB. El mercado laboral soriano lleva tiempo siendo absolutamente disfuncional. No es nada nuevo, pero la situación se agrava en un futuro cercano», resalta Santiago Aparicio.

En este sentido, en FOES ponen de relieve estas proyecciones: considerando los actuaciones grupos de edad de cinco-nueve años y diez-catorce años, futuros trabajadores, dentro de una década, aproximadamente, se incorporarán hasta 7.465 personas al mercado de trabajo soriano, que perderá en el mismo periodo 13.894 activos por jubilación (suma de los grupos de edad de 55-59 y 60-64 años).

Así las cosas, el presidente de la Cámara de Soria considera que sería útil crear un observatorio del que formen parte «todos los actores implicados», incluidas las administraciones, para ver «cómo se puede absorber el trabajo con garantías». No obstante, admite que los sucesivos periodos electorales no ayudan, ya que, en su opinión, son momentos de «promesas», pero no de acciones reales y efectivas.

Otra de las posibles soluciones que plantea Santamaría pasa por atraer a familias, no solo con un puesto de trabajo, sino con dos, y poner a disposición de las mismas vivienda «asequible». «Hay que ver qué perfil de trabajadores está dispuesto a moverse de las grandes ciudades», puntualiza Santamaría.

Igualmente, apunta a que, en cierto modo, la reforma laboral ha complicado la contratación. «El trabajo a media jornada, complementario, es bueno. Hay que adaptar las jornadas laborales a las necesidades de las empresas, evitando los abusos. Pero se ha restringido la flexibilidad a la hora de contratar. En Soria, la población supera los 200.000 habitantes en verano y las empresas necesitan trabajadores en determinados sectores», abunda el responsable de la entidad cameral.

estancamiento económico. A juicio del presidente de FOES, un mercado laboral «tan pequeño» como el soriano (con 2.774 desempleados en mayo) «frena» la creación de empresas e «impide» el relevo generacional en las que ya operan. De hecho, la pérdida de empresas en la última década es del 2,41%.

«Aún es más preocupante el envejecimiento de los autónomos, que se traduce en un incesante cierre de negocios», subraya Aparicio. Y es que, en la actualidad, el 50,8% de los trabajadores por cuenta propia tiene más de 50 años y los que se incorporan a este régimen de cotización apenas supera el 5%.

El presidente de la patronal reitera que todos los sectores manifiestan problemas a la hora de contratar trabajadores cualificados. En el último Observatorio de FOES, el 66% de los empresarios consultados así lo manifestó. Instalación y mantenimiento; electricidad y electrónica; hostelería y turismo; transporte y mantenimiento de vehículos; fabricación mecánica; informática y comunicaciones; sanidad... son algunos sectores en los que se han detectado estas dificultades. «La falta de trabajadores disminuye la productividad, agrava el déficit de talento y anula la innovación. Desde FOES seguimos reclamando medidas eficaces que pasan, en primera instancia, por la aplicación de las ayudas de funcionamiento, en su máxima in