La Junta garantiza "toda su voluntad" para el Diálogo Social

SPC
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Carlos Fernández Carriedo y Mariano Veganzones restan importancia a los avisos sindicales, que ven la cita de final de mes como «la última oportunidad de salvar» el modelo de concertación

Alfonso Fernández Mañueco preside la última reunión del Consejo del DiálogoSocial, celebrada el 11 de julio del pasado año. - Foto: Ical

Tranquilidad y absoluta normalidad. Este es el mensaje que la Junta de Castilla y León traslada a las centrales sindicales para intentar calmar los ánimos de CCOOy UGT de cara al Consejo del Diálogo Social  que se celebrará el día 26 o 27 de julio tras más de un año sin convocarse, y que llega después de la polémica del Serla, el recorte de subvenciones, y con más de una decena de demandas interpuestas contra las políticas del Ejecutivo regional. Una cita que los líderes sindicales de la Comunidad ven como «la última oportunidad» para salvar el modelo de concertación autonómico. Extremo que desde el Ejecutivo regional niegan tajantemente y garantizan que pondrán «toda su voluntad» para que se produzcan nuevos avances en el Diálogo Social. Dos miembros del Gobierno de Castilla y León salieron ayer al paso de la advertencia lanzada por el secretario regional de CCOO, Vicente Andrés, que remarcó que el Diálogo Social está «maltrecho» y «muy deteriorado».

Tanto el portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, como el consejero de Empleo e Industria,MarianoVeganzones, señalaron ayer  que el Diálogo Social «está en buena forma» y auguraron que la reunión de su Consejo se celebrará en un «marco de normalidad». «Siempre estamos abiertos al diálogo», resumió Fernández Carriedo, preguntado por la aseveración del secretario regional de CCOO, y calificó de «oportuno» que la reunión se desarrolle antes del periodo vacacional y tras la celebración de las elecciones, pues recordó que existe el acuerdo de que el Consejo del Diálogo Social no se convoque en un proceso electoral.

Fernández Carriedo reiteró durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que durante el último año en el que no se ha reunido el Consejo del Diálogo Social, se ha trabajado y ha habido varios acuerdos, si bien se detuvo en desgranar que la Junta acude con «la voluntad de poner todo su esfuerzo» para que haya avances.  El consejero portavoz insistió en la idea de analizar los acuerdos y en la posibilidad de avances con la parte social, en un proceso a tres bandas que calificó de «complejo», pero también se mostró convencido de que todos sus actores acudirán a la reunión con su mejor disposición.

En la misma línea se pronunció el consejero de Empleo, Mariano Veganzones, que explicó que el nuevo encuentro del Consejo del Diálogo Social se producirá «como se ha venido realizando todos los años, con una o dos reuniones» para «poner en común los temas objeto a poner en marcha o la continuidad de los que se venían realizando». El consejero, foco de las críticas de los sindicatos, trasladó que «todos debemos estar satisfechos de que el Diálogo Social es una de las señas de identidad de Castilla y León y continúa funcionando con normalidad a pesar de los mensajes de alarma vertidos» durante los últimos tiempo, que «no tienen sentido». No obstante, minutos después denunció que no saben «si hablan con sindicatos o con Bildu» en la Comunidad, porque «las tácticas son las mismas, la mentira y la ocultación de la información», en relación a la denuncia de CCOO y UGT sobre los recortes de personal en el Ecyl.

A la tercera

Una visión del modelo de concertación autonómica que no comparte el secretario regional de Comisiones Obreras, Vicente Andrés, que ayer avisó que el encuentro de final de mes es «la última oportunidad para salvar» el Diálogo Social. En cualquier caso, celebró en tono irónico que «a la tercera va la vencida», tras las misivas remitidas por su organización al presidente de la Junta para que convocase este órgano. Remarcó Andrés que el Consejo del Diálogo Social se debería reunir dos veces año y «no lo ha hecho», y recordó que la última cita se produjo el 11 de julio de 2022. Tras un año, repasó, «hay diez demandas en los tribunales, dos requerimientos de instituciones europeas y cuatro movilizaciones en la calle» contra el Ejecutivo regional PP-Vox.

El líder de CCOO mostró su «asombro» por hasta dónde se ha llegado en un proceso de «enfrentamiento y complicación basado en que Mañueco ha dejado hacer a una parte minoritaria», en referencia a Vox, y bromeó en que llegarán el encuentro «un año más viejos», pero donde «las desconfianzas son enormes», informa Ical.