En el año 2021, Sebas Martos llegaba desde Jaén a Soria buscando un cambio de aires. Se ponía a las órdenes del forjador de leyendas, Enrique Pascual Oliva, con el objetivo de conseguir volver a ser competitivo pasando los 30 años. No fue sencillo al principio. «He tardado año y medio en lograr resultados», reconoce el jienense. 2022 ha sido el año de su regreso.

Campeón de España en verano, el atleta que ahora representa al equipo Hoka saboreaba de nuevo las mieles del éxito. «He mejorado en invierno», comenta. Logró la medalla de plata en pista cubierta. «He mejorado en verano, he sido campeón de España, he sido finalista en un Mundial y en un Europeo, he mejorado mis marcas y tengo 33 años, todavía tengo cuerda para rato», sentencia.

2023 comienza para Sebas Martos con un optimismo más que realista, con los objetivos claros y con un estado de forma que nada tiene que ver con su edad. Ahora la experiencia juega a favor de uno de los olímpicos que representan a España.

El proceso. Si alguien le dice a Sebas Martos que cambiar el calor de Jaén por el frío soriano le iba a dar este resultado, le hubiese tomado por loco. «Cuando llegué a Soria no pensaba que llegaría a este nivel», reconoce con humildad. «Sé que alguna vez acabará, que el cuerpo tiene un límite, pero lo que siento es que cada día me voy encendiendo más», asegura. 

No se trata de hablar por hablar. Este verano rebajaba su mejor marca personal en dos segundos. Sus ocho minutos y 16 segundos le clasificaban para las citas internacionales, pero lo más llamativo es que batía un tiempo que ya duraba ocho años. «Me encuentro genial, se refleja en esas marcas», advierte. 

Este proceso se basa en carga y más carga. «Ahora entreno con más intensidad y con más cantidad de kilómetros al día», detalla. «Estoy creando unos hábitos muy saludables para evitar lesiones, he ganado confianza en mí mismo y eso me lo ha inculcado Enrique», reconoce. Su entrenador y un grupo de entrenamiento con grandes nombres como Dani Mateo, han creado un entorno perfecto para su evolución.

Sebas Martos no necesita pensar 24 horas en el atletismo para lograr todo esto. «No pienso más que antes en correr, solo lo adecuado», puntualiza. «A la vez estoy estudiando fisioterapia, no pienso tanto en correr, no quiero saturarme», añade. El equilibrio mental que ha conseguido con la experiencia de los años, juega a su favor.

Su mayor puntal es Enrique Pascual Oliva, su entrenador lo ha reconvertido. «Enrique es un pilar fundamental», destaca. «Un 80% de lo que hago sale porque él sienta la base» continúa. «Luego lo demás es el entorno, el grupo de entrenamiento, pero una gran parte es su culpa», finaliza. Con esos mimbres el jienense entra ahora en la temporada de invierno aspirando a todo.

Objetivos. Lo primero que han hecho todos los atletas españoles al iniciar el 2023 es mirar las mínimas  que se piden para estar en los Juegos Olímpicos de París 2024. Cada carrera ahora cuenta y el Comité Olímpico Internacional no ha puesto las cosas nada fáciles. «Las marcas son muy duras, todos decimos lo mismo», alerta Sebas Martos.

Si miramos a los 3.000 obstáculos, el jienense está a un segundo de conseguir esa mínima para la cita olímpica. «Estoy muy cerca, tengo que dejarme de tonterías de mirar el ranking y centrarme en lograr la marca, ese es mi gran objetivo», cuenta el atleta. En los primeros entrenamientos del año todo hace pensar que lo conseguirá. 

La presión para los corredores aumenta y más por la situación económica actual. «Antes con 27 años si tenías gran nivel, se ganaba más dinero, lograbas una estabilidad económica y ahora no es tan bueno y tenemos que seguir entrenando», alerta Martos. Una advertencia que comienza a ser generalizada.

En el otro lado está el ver a atletas de más de 30 años consiguiendo grandes marcas. «Las nuevas tecnologías en zapatillas nos evitan lesiones, todo va avanzando y se están consiguiendo mejores marcas» explica. «Es bueno que la edad sea solo un número», añade. Con esa mentalidad ya tiene fijado en el punto de mira las grandes citas del año.

El invierno está marcado por el Campeonato de Europa de Pista Cubierta de Estambul del mes de marzo. «Voy a por ello», avisa. Lo hará en los 3.000 metros lisos. «Me adapto mejor desde que llegué a Soria porque trabajo mucho la intensidad y la velocidad en Soria, y tengo un punto más de fluidez que no tenía», reconoce. Después llegará el verano y el Mundial, momento en el que afrontará la mínima olímpica. «Queda Sebas al 200% al menos hasta París 2024». El jienense va a por todas.