Con gran cantidad de cancelaciones de última hora así es como viven está etapa previa a la Semana Santa las casas rurales sorianas. Denuncian además la desinformación por parte de las instituciones a la población en general, explican que las personas que han reservado ni siquiera son conscientes de no poder compartir alojamiento con otros no convivientes. Incluso ellos mismos tienen que advertir a los clientes para que puedan cancelar las reservas a tiempo. La facturación sigue a cero y mientras, aseguran, tienen que lidiar con estos agravios comparativos con albergues o campings que si pueden tener alojados a grupos de no convivientes. Consideran que no es una normativa justa. Con el 50% de las casas rurales de la provincia cerradas y muchas reservas canceladas de última hora, lo que está claro es que el turismo está Semana Santa quedará reducido a la mínima expresión en Soria.

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