El alcalde socialista de Ágreda, Jesús Manuel Alonso, defendió hoy que los indultos aprobados por el Gobierno a los presos del 'Procés' en la anterior legislatura pretendían fomentar la convivencia entre Cataluña y España, pero la amnistía que se plantea aprobar ahora nada tiene que ver con esta medida de gracia, ya que los indultados de 2021 fueron juzgados por los delitos que cometieron, frente a Carles Puigdemont que a su juicio no rendirá cuentas por los que cometió e impone este proceso al Gobierno.

El primer edil de Ágreda señaló que en 2016, cuando era senador por Soria, participó junto con otros dirigentes socialistas en la manifestación a favor de la unidad de España en Barcelona, y detectó que en Cataluña había una "convulsión social" debido a que multitud de jóvenes fruto del "adoctrinamiento al que son sometidos y a un desconocimiento de la realidad objetiva de la historia de España" querían romper con el país.

En su opinión, ante este escenario, se debía intentar "hacer algo por la conciliación", ya que los dirigentes de Esquerra, que estaban encausados, también reconocían "en privado que habían engañado a la gente porque sabían que no iban a lograr la independencia, pero que si se echaban para atrás les acusarían de traidores".

"Yo creí, en aquella época, que se debía quitar esa motivación que tenía parte del pueblo catalán. Yo interpreté que una forma de normalizar y flexibilizar la vida social en Cataluña era conceder alguna medida de gracia a aquellas personas que no habían huido del país y que se habían sometido a los tribunales e incluso que habían estado privado de libertad a consecuencia de lo que hicieron", resaltó.

Alonso señaló que el Gobierno no plantea la amnistía por "convicción" sino por "imposición" de Puigdemont, un "prófugo" de la justicia que huyó de España y ha rehusado volver para rendir cuentas ante los tribunales, y agregó que el político catalán dio cobertura a delitos como la malversación de fondos públicos, atentados contra la propiedad privada y la integridad física de las personas. 

"Creo que si el Gobierno hubiera decidido aprobar la amnistía porque era el método más adecuado para conseguir una mayoría estable, los ciudadanos lo hubieran entendido", destacó para señalar que Puigdemont cometió delitos penales y se debería de haber sometido al ordenamiento jurídico español.

Finalmente, recalcó que el Gobierno en funciones ha cambiado de opinión y de posición frente a la amnistía ya que, hace escasos meses, consideraba que no tenía cabida en la Constitución por lo que "nunca se iba a conceder". "Ante un cambio de posición tan radical yo no puedo estar de acuerdo con ello", concluyó.