Una piedra de grandes dimensiones y 200 toneladas de peso se partió este sábado en dos en Muriel Viejo ante la sorpresa de varias personas que cogían agua en la fuente de agua mineral. La parte desprendida puede caer sobre el río que lleva el mismo nombre, por lo que la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) está examinando las posibles soluciones para evitar que haga una presa. 

Carlos González, alcalde de Muriel Viejo, explica que esta piedra se encuentra sola en esta lugar, también junto al hotel El Cielo de Muriel, pero a 50 metros hay alguna más. "Naturaleza en estado puro", describe el alcalde sobre este suceso advirtiendo de que "en cuanto se empape la piedra caería sobre el río y haría una presa". El caudal del río "ahora es bajo, afortunadamente" y es en otoño cuando lleva más agua, por lo que pide una solución a este problema cuanto antes a la confederación.