El pastor trashumante Eduardo Rincón pide ayuda urgente

EDS
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Desde Brazatortas (Ciudad Real) no puede regresar a Los Campos (Soria) con su rebaño por restricciones sanitarias y también se ve afectado por la sequía. Pensaba seguir más, pero dice que está "arruinado" y no quiere continuar en el sector ganadero

Eduardo del Rincón, de 66 años y uno de los últimos pastores trashumantes de Tierras Altas en Soria y de Castilla y León, pasa momentos difíciles porque no puede regresar a Soria con su rebaño desde Brazatortas (Ciudad Real). El ganadero sostiene que su intención era volver el 14 de junio pero por problemas burocráticos relacionados con la viruela ovina, aunque los animales de su explotación (1.000 ovejas) estén sanos, no puede moverse por las restricciones establecidas desde la UE. "El último brote se comunicó el 18 de mayo en Cuenca" y "aquí estamos a 200 kilómetros" de las granjas más cercanas afectadas, que son todas de intensivo y ordeño.

El ganadero cee que "en su día no se actuó a tiempo", como sí hicieron en Granadad, donde se precitaron las naves a tiempo.El ganadero soriano insiste en que la ganadería es "una ruina" por la sequía y porque no puede pagar más pienso, "los animales se mueren" si la administración no ofrece solución. Él gasta en pienso unos 6.000 euros al mes, por lo que el coste de los días que tiene que estar allí de más suponen un duro golpe. "Nunca he estado tan reventado como este año", añade desesperado y reclamando una solución a las administraciones. "Es triste tras una vida tener que deshacerme ahora de las ovejas, tener que quemarlas porque no las puedo alimentar". Y es que tampoco hay pastos, "está todo recalentado, como una carretera. Ahora queríamos ver a las ovejas pastando en las praderas verdes de Tierras Altas".

Todo se debe a un brote de viruela ovina, que ha dejado a unas 15.000 cabezas de ganado trashumante de Castilla y León, Extremadura, Andalucía y Aragón atrapadas en Ciudad Real. La viruela ovina es una enfermedad muy contagiosa y letal para los animales, por lo que la Unión Europea prohibió el pasado mes de abril mover el ganado fuera de las comunidades afectadas: Andalucía y Castilla-La Mancha. El 19 de septiembre se detectó un primer foco en la provincia de Granada. Ahora son 30 en varias localidades andaluzas y castellano-manchegas. Para Eduardo Rincón, la medida es injusta y "hubiera sido mejor establecer un perímetro alrededor de donde se dieron los brotes de 30 kilómetros". 

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Se han contabilizado siete focos de viruela ovina y caprina registrados en España en lo que va de 2023, todos ellos focalizados en Castilla La Mancha: 3 en la provincia de Cuenca y los otros 4 en la de Ciudad Real. Son 30 en España desde 2022, con un primer foco registrado en Andalucía, y que continuó con presencia de la enfermedad en Almería y Granada hasta que dejaron de notificarse focos a finales de ese año.

En Castilla La Mancha se trata del foco número 17 de la enfermedad, con 13 focos en la provincia de Cuenca y 4 en la de Ciudad Real. Con los últimos casos en Ciudad Real, se aplicó la correspondiente zona de restricción, que incluye una zona de protección (municipios incluidos en el radio de 10 km) y vigilancia (municipios en el radio de 30 km) a su alrededor. Este último foco, por tanto, es el primero que se notifica en la provincia de Cuenca en varios meses, ya que desde enero llevaban sin confirmarse casos de la enfermedad en las explotaciones conquenses, concentrándose los focos en Ciudad Real.

Rincón dudaba de continuar en el sector algo más, pero anunciaba su retirada y que sería su última trashumancia porque no puede más, además tiene que hacerlo "arruinado". Tampoco quiere ya que su hijo tome el relevo, como pensaba hacer porque "tenía ilusión". Se ha formado como tornero y ahora se dedicará a ello. La familia se trasladará a vivir definitivamente a Soria. "Solo quedamos trashumantes del puerto de Oncala y de Cáceres, necesitamos una solución porque esto se acaba. Si en diez días no tenemos solución las llevo al matadero, porque no puedo aguantar más", incide. "Que nos dejen ir a nuestras tierras. El ganado es como los pájaros y cuando llega su tiempo tiene que emigrar, aquí no se puede tener nada retenido. Si lo hacen así, que nos paguen el alimento del ganado, porque el plazo para estar en la finca me cumple el 10 de junio y me echan. ¿Dónde voy con el ganado? Quiero una solución ya, solo pido eso", añade con gran malestar.

David Ortega, conocido de la familia, compartía este vídeo con el mensaje desesperado de Eduardo Rincón en las redes sociales Twitter (@daviddcoba) e Instagram (@doydasdavid)