No hace falta mirar demasiado atrás en el tiempo para ver a un Club Boxeo Numancia al borde de la desaparición. Sin cantera, con muy pocos luchadores y sin una referencia en competición tras la retirada de Reda Brahmi, la entidad vivía tiempos difíciles. Fue precisamente el propio Reda el que daba un vuelco a la situación. Colgaba los guantes, pero se volcaba en cuerpo y alma en levantar la estructura soriana.

En este 2021 se ha dado el paso definitivo. Durante este año han debutado hasta cuatro boxeadores, «quizás precipitadamente en algunos casos», reconoce el propio entrenador, «pero era necesario para conseguir dar nombre al club en competición». Eso después llevará «a que haya estandartes en Soria que permitan que la cantera tenga una referencia para el futuro», y el objetivo se ha conseguido.

Los últimos en dar el paso han sido Edas Kiaulakys y Mohamed Reda El Hamaidi, «ambos perdieron, pero demostraron que tienen mucho potencial para el futuro». Es solo el comienzo de lo que buscan que sea habitual en 2022, «esta tiene que ser la tónica a seguir, entrenamientos más exigentes y combates en el calendario que den nombre a la entidad». El Club Boxeo Numancia busca ser uno más en las competiciones regionales y nacionales, el próximo año.

De familia. Edas Kiaulakys debutaba en un Campeonato de España Joven con 18 años en la categoría de menos de 49 kilos, perdiendo su combate pero dejando muy buenas sensaciones, «una hemorragia me obligaba a detener la pelea». Esa es su cuenta pendiente, «aprender a no llegar a esas situaciones para evitar perder así», reconoce.

Sus inicios en el boxeo comenzaron cuando tenía 14 años, pero su idilio con ese deporte llegaba mucho antes, «mi padre era boxeador y yo estaba deseando ponerme los guantes». De origen lituano, discutía en casa constantemente para poder subirse a un ring, «mi madre no me dejaba». Pero desde el primer contacto con el cuadrilátero no se han vuelto a bajar.

En los entrenamientos destaca por su actitud y por tener muy claras donde están las claves para ser mejor, «soy pequeño y por eso me centro en ser muy rápido». El físico es clave, «es la parte que más trabajo porque quiero que a partir de ahí puede ganar combates». Su rasgo más característico, la valentía, «me gusta combatir y quiero hacerlo cada vez más, pero esta vez ganando».

Tras su experiencia en el nacional, quiere más, «fue espectacular estar en una cita de ese tipo, con boxeadores con mucho nivel». Reconoce que aprendió «muchísimo de todo lo vivido», y que la derrota «no cambiará nada». Una actitud única que Reda Brahmi alaba, «es un placer poder entrenar cada día con él y ver todo lo que está evolucionando». Considera que tiene un gran futuro por delante y que en 2022 pueden llegar las primeras alegrías.

Novato. Con apenas unos meses de entrenamiento,  Mohamed Reda El Hamaidi, disputaba el pasado primer fin de semana su primer combate, «en este caso reconozco que no estaba preparado del todo», reconoce el entrenador". Su rival, con mucha más experiencia, fue superior de principio a fin, «fue muy complicado porque era mejor que yo», asegura Mohamed, «pero me quedo con todo lo vivido, tengo la certeza de que quiero seguir compitiendo», asegura con convicción.

Con 19 años, se encuentra en la categoría de menos de 62 kilos, «estoy feliz con todo lo que estoy viviendo desde que comencé en el boxeo». Sabe que tiene mucho que trabajar, «no entreno demasiado y tengo que dedicarle un poco más de tiempo si quiero comenzar a ganar». Un trabajo para el que forma un buen binomio con su entrenador, «me ayuda mucho y siempre me empuja a pelear por mi sueño». Actitud no le falta.

Para poder seguir compitiendo, el técnico le exige mucho más, «un deporte como este requiere dedicación en todos los aspectos, pero creo que si siguen por este camino y le ponen un poco más de empeño, podrán vivir momentos muy buenos en el boxeo». La ilusión del entrenador es la que transmite a sus pupilos, los nuevos boxeadores que llevan ya el nombre de Soria por todo el panorama nacional.