El rebaño del pastor trashumante Eduardo Rincón, de Los Campos, ha recibido esta semana 6.000 kilos de pienso (700 gramos por animal) para poder alimentarlo mientras se encuentra inmobilizado en Brazatortas (Ciudad Real) por un brote de virurla ovina en Castilla La Mancha, porque tenía previsto regresar a Soria como cada verano para que los animales pastaran en Tierras Altas. A los ganaderos que han quedado allí no les daban solución, pero la UCA de Almodóvar del Campo le ha informado de que se realizará un análisis a las ovejas, previsiblemente a principios de la semana que viene, para comprobar que están sanas.

En 72 horas tendrán los resultados y podrán regresar a Castilla y León, con los correspondientes permisos de la Junta de Castilla y León que ya se van a solicitar. Sin embargo, lo hará unas semanas después de lo que tenía previsto. El pienso que recibirá, informa, está valorado en 60.000 euros, lo que agradece aunque sin dejar de insistir en que "la situación no tiene sentido" y que "las ovejas están sanas" y lejos de los brotes de esta enfermedad. La Junta de Castilla La Mancha fue la que limitó el movimiento del ganado por riesgo de contagio.

Como consecuencia de ello, las Jornadas de la Trashumancia de la Mancomunidad de Tierras Altas, que consisten en acompañar al ganado trashumante desde Soria capital hasta esa comarca y en una fiesta y homenaje a los pastores al final del trayecto, han tenido que suspenderse porque no cuentan con permiso para el traslado de las ovejas merinas. El ganadero muestra su disgusto y las pérdidas que ha supuesto esta inmovilización para él, que pensaba jubilarse este año.