Con una preparación de pocas semanas en las que los problemas físicos siempre habían estado presentes, Dani Mateo se presentaba en Hamburgo buscando una maratón épica que le permitiese estar en el Mundial de Budapest.
Durante el primer tramo de la prueba, el adnamantino dejaba buenas sensaciones en cuanto a tiempos se referir. Pasaba la media maratón en 1 hora, 4 minutos y 48 segundos, pero a partir de ahí no ha podido dar más. Tras bajar el ritmo, se ha retirado a los 30 kilómetros perdiendo su último tren a Budapest.