Un verano de cifras récord. Estas son las estimaciones de las principales empresas dedicadas al comercio, que esperan superar a lo largo de los próximos meses los niveles precrisis. Será la gran afluencia de visitantes extranjeros prevista para el período estival y las compras de ropa, calzado o cosmética, por el tirón de las campañas de rebajas, las que ejerzan como salvavidas del comercio para el último semestre del año.
Exceltur, la alianza que agrupa a las principales compañías turísticas, considera que esta circunstancia elevará el gasto y aumentará las compras que afectan indirectamente al sector del comercio al por menor en aquellas regiones y zonas con gran afluencia de viajeros.
Esta patronal corrigió al alza sus previsiones para la segunda mitad del año sobre la actividad generada por los diferentes subsectores (alojamiento, transporte u ocio), del 2,2 por ciento a un 9,4 por ciento más sobre el cierre de 2019 (prepandemia), aunque bajo el yugo de la elevada inflación.
Desde Acotex, la Asociación del textil y complementos, alertaron de una primera caída mensual en tasa interanual del año en relación con las ventas después de cuatro meses de incrementos continuados, ya que en mayo se redujeron un 5,7 por ciento.
El presidente de esta patronal, Eduardo Zamácola, calificó el dato como «la primera señal de alarma». Este retroceso, a su juicio, obedece a la subida de los tipos de interés y, por lo tanto, de las hipotecas que lastran el bolsillo de las familias. «Se observa que el consumidor vuelve a mostrar reticencias a la hora de comprar ropa», afirmó el presidente de Acotex, quien advirtió de un «cierto recelo e incertidumbre para final de año con unas elecciones el 23 de julio».
En general, Zamácola insistió en que el sector textil está aún «muy lejos» de las cifras de prepandemia y precisó que no maneja unas estimaciones positivas para el conjunto de este año.
No obstante, el directivo subrayó el repunte de la afluencia de turistas y su relación con las compras de artículos de moda y complementos, que ya en 2022 supusieron el 65 por ciento del desembolso de estos viajeros en las visitas al país.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) comentó sobre las compras que tres de cada cuatro familias «viven al día y sin capacidad de ahorro» y consideró que muchas familias aprovecharán las rebajas para afrontar la adquisición de vestido y calzado que estuviera pendiente.
El comercio de proximidad espera para esta campaña de rebajas poder dar salida al inventario acumulado tras una primavera marcada por la lluvia y las bajas temperaturas. La previsión de ventas en el sector es del cinco por ciento más que en las rebajas del año pasado, si bien seguirá por debajo de los niveles de la prepandemia.
Una incógnita
La confianza del consumidor subió en mayo por segundo mes consecutivo, debido principalmente, según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), a la evolución positiva de sus dos variables: la valoración de la situación actual y también de las expectativas de futuro. En cambio, un informe de perspectivas del consumidor elaborado por la consultora Kantar indica que más del 40 por ciento de los españoles cree que la actitud más inteligente es reducir su nivel de consumo debido a la inflación. El 2023 «se presenta conservador para el consumo por la inquietud que provoca la situación económica», concluyó el estudio.
No obstante, subrayó que los españoles van a preferir dejar en vía muerta la compra de bienes que les implique un largo plazo y un gran esfuerzo, como puedan ser las de coches, vivienda o la solicitud de un préstamo, y orientarán sus intenciones de compra al día a día y a desembolsos más modestos.