Tentar a la suerte de invierno en el verano soriano

S.Ledesma
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Asociaciones locales y turistas de paso han sido los principalescompradores de lotería de Navidad durante los meses de verano

Tentar a la suerte de invierno en el verano soriano - Foto: Ana Renta Poza

Pensar en la Navidad en pleno verano cuando las temperaturas han batido récords este año en la provincia de Soria puede parecer llamativo, pero cuando se habla de lotería no suena tan extraño. La suerte para el Sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad está a la venta en ventanilla y por terminal (cuando se busca el número soñado) desde el pasado 3 de julio. Desde entonces, cientos de personas han tentado a la diosa Fortuna para uno de los juegos de azar más esperados del año, alentados por el hecho de que la provincia «tiene la fama de que suele tocar algo todos los años». Asociaciones locales y turistas de paso, aunque también los «sorianos de la diáspora» que, posiblemente, «no vuelvan hasta ya pasado el sorteo», han sido el 'cliente tipo' durante estos meses de verano, «principalmente en agosto», según las administraciones de lotería consultadas por este periódico.

Para este año hay una novedad importante: se han puesto a la venta cinco series más por número. Esto significa que la emisión asciende a 185 series con 100.000 números cada una, por lo que aumenta la probabilidad de hallar el deseado. La emisión asciende así a 3.700 millones de euros, 100 millones más que en el sorteo del año pasado. De ellos se repartirá el 70%, por lo que el juego de azar más cuantioso del año repartirá 2.590 millones de euros en premios, 70 millones más que en 2022. 

Los más previsores ya han invocado a sus particulares hados para dar con el número anhelado, también «para que toque en Soria, que falta nos hacen». Con ese ánimo  compraba décimos «para compartir con la familia» una pareja de turistas de Barcelona «en diferentes administraciones de la provincia», una de ellas Soria Mágica en Camaretas. A la puerta explicaban que les gusta «hacerlo así por tradición: vamos 'picando' según vamos pasando por algunos lugares y luego los compartimos». En lo que les quedaba de viaje hasta su destino todavía harían alguna incursión más «por el camino; si paramos en un sitio y está abierta la administración, compramos». A la puerta del mismo local, unos «hijos de Soria, pero vivimos en Madrid» también habían comprado lotería de Navidad «para llevarnos un poquito de suerte; no sabemos cuándo podremos volver otra vez a Soria a pasar unos días». Quién sabe si ese 'poquito de suerte' se convertirá en una alegría. 

Los loteros coinciden en que dar un premio, sobre todo si es El Gordo, es su esperada recompensa a su trabajo diario. Entre los números más buscados, por supuesto, el supersticioso 13, temido y agraciado a partes iguales, aunque las terminaciones en 7 y en 5 siempre tienen tirón en la provincia. 

loteros. El mes de agosto, con sus calurosas jornadas, es en el que mayor trasiego se ha notado. Desde la mencionada Soria Mágica aluden a este fenómeno, por tratarse de un centro comercial en el que buscar algo de fresco. «Se ha notado que ha venido más gente por el calor, pero en verano es verdad que se vende más, sobre todo a turistas», indican las mismas fuentes. También en otro espacio comercial se encuentra el kiosco de E.Lecrerc, desde donde explican que las ventas han sido buenas. «Cada año se nota más que la gente viene buscando lotería de Navidad porque Soria tiene la fama de que todos los años toca algo», inciden desde el punto de venta, donde han despachado a turistas, pero también a muchos «hijos de Soria que viene a pasar las vacaciones aquí;la gente de aquí se espera un poquito, pero algo se va cogiendo».

La administración de Almazán cumplirá en diciembre 110 años de historia. Aunque la celebración se hará «al año que viene», a su titular, María Victoria Cid, ya le han encargado 'adelantarla' con el reparto de El Gordo. Yla propuesta, además de no sonar nada mal, no es nada descabellada: en 2006 lo hizo con el reparto de 375 millones de euros, aunque también ha dado un tercero y un quinto de Navidad, entre otros premios. «Ya ha habido un par de personas que me han dicho estar convencidas de que este año repartimos algo y eso sube la moral; dar un premio y toda la alegría que conlleva es la mayor recompensa que podemos tener», indica Cid. Por su parte, en la administración número 2 de Soria admiten que cuando la gente llega hasta el despacho a por décimos y ve los premios que han repartido «les llama la atención» y eso «siempre influye» en la adquisición de un pedacito de suerte para algún sorteo.