Cuando hace dos semanas recordaba a mi amigo Mariano y de cómo se habría decepcionado ante unas Elecciones Municipales que no iban acompañadas de otras de mayor amplitud geográfica, no podía imaginar, ni yo ni nadie, que en apenas quince días se iban a anunciar nada más y nada menos que unas Elecciones Generales. Que sí, que todos teníamos en la cabeza que a finales de año nos tocaba volver a las urnas. Que apenas acabásemos las vacaciones empezaría, o continuaría, la refriega entre los distintos partidos para preparar una nueva campaña electoral. Pero así, tan de repente, casi sin conocer los resultados más allá de nuestras fronteras provinciales -que es lo que a los sorianos nos importaba, por mucho que los medios de comunicación nacionales se empeñasen en informarnos, día tras día, de los esfuerzos que hacían los candidatos en otros territorios-, tenemos que volver a escuchar 'todo' lo que el futuro Gobierno de la nación va a hacer por nosotros.
De nuevo Soria va a ser visible en el mapa político, los dos diputados que nos representarán en el Congreso volverán a despertar el interés de los distintos partidos, al menos de los dos más importantes, pues los demás saben que mucho tienen muy, muy difícil convencer para lograr representación. Será ahora cuando volvamos a escuchar lo que Soria es gracias a Madrid y Valladolid, o lo que es lo mismo, lo que PP y PSOE, como partidos políticos, han hecho por los sorianos. Se desempolvarán antiguas promesas, se actualizarán proyectos y nos demostrarán que Soria les importa, y mucho, a ambos. Seguro que las notas que recogía mi amigo Mariano en anteriores programas poco se desviarán de los que en breve nos presentarán. Pero con lo que sí habría disfrutado Mariano, se frotaría las manos como siempre hacía cuando algo le fascinaba, es con la irrupción de Soria ¡Ya! en unas Elecciones Generales, con la incertidumbre que va a suponer que sus propuestas -que todos conocemos o deberíamos conocer- no solo les resten votos a los dos partidos mayoritarios, sino que puedan quitarles el diputado con que, al menos, cuentan desde la sede de cada uno de ambos partidos.
Todos sabemos que Soria ¡Ya! tiene mucho que decir en estas elecciones, sobre todo por lo que representa para nuestra provincia y el valor que puede tener su voz como ha demostrado Teruel Existe en esta legislatura que acaba. 
Unas elecciones con numerosos cambios: sorpresa en su convocatoria, en un mes de verano como el de julio, partidos que desaparecen, partidos nuevos. De nuevo se nos vendes miedos y esperanzas, ataques y advertencias, críticas y alabanzas, los ciudadanos a un lado y las grandes figuras (¿cuántas se acercarán a Soria?) en un tablero de ajedrez en el que quien de verdad se la juega es nuestra provincia. Y es que nos metemos en el mes de junio, con lo que esto supone para Soria, en plena precampaña y sin recuperarnos de las fiestas de San Juan, en ese mes atípico, nos veremos inmersos en unas elecciones, como todas, muy importantes para nosotros y nuestro futuro..