Jesús Bachiller

Jesús Bachiller


Un resultado electoral acorde con la campaña

30/07/2023

España es como es y no como quiere que sea una determinada formación política; es un país diverso, plural en lo político y complejo en lo territorial, que reclama mayor capacidad de diálogo para conciliar las diferencias políticas y los intereses territoriales. El resultado de las elecciones es una consecuencia a nuestro juicio de la campaña electoral. Una campaña anómala, de las peores que se recuerdan, centrada en los rechazos más que en las propuestas, en la apelación a las emociones más que a los debates serenos, convertida finalmente en un plebiscito sobre el sanchismo. Cuando esto ocurre, la verdad es la primera víctima en la disputa política; se abre el paso a la acusación, la exageración, las medias verdades, la demagogia y salen del debate los temas importantes como la economía, el medio ambiente, la energía, los servicios públicos, la desigualdad social y territorial, la Unión Europea y un largo etcétera. No se entiende que no haya habido debates sectoriales sobre esos temas, empezando por la economía, de la que ni siquiera sabemos quién es el candidato de la oposición. Sin embargo, hemos asistido a debates sobre las encuestas, con descalificaciones a algunos de sus responsables, para finalmente comprobar lo distantes que estaban de la realidad. Resulta llamativo que haya sido una periodista de rtve, vilmente repudiada por algunos dirigentes populares, la que desmontara las "inexactitudes" del Sr. Feijóo o que la Sra. Díaz acabara usando la relación del candidato con un narcotraficante para truncar las expectativas del PP.

Tensionar tanto la campaña ha acabado produciendo una sorpresa inesperada, la remontada del PSOE. El cálculo electoral, la concentración de voto, el recurso al voto útil ha simplificado el panorama político. Se ha reforzado el bipartidismo, se ha reducido el número de partidos representados en el Congreso, pero, por el contrario, se ha dificultado la gobernabilidad del país. Estaba claro que en las elecciones generales se jugaba mucho más que en las municipales y autonómicas. El tensionamiento de la campaña, las contradicciones del PP en su relación con Vox y la previsión de una más que probable entrada en el gobierno de este partido ha acabado movilizando al más crítico electorado de izquierdas. De esta forma, se ha visto cómo la respuesta ante el panorama electoral ha variadosegún los territorios. Cataluña ha sido el gran artífice de la resistencia de Pedro Sánchez. Se puede decir que los ciudadanos catalanes no han dudado en plantar cara a un posible gobierno PP-Vox, por encima de otros intereses nacionalistas. También País Vasco y Navarra han votado diferente al resto de comunidades. Solo Extremadura ha reaccionado positivamente a la formación del nuevo gobierno con Vox. El PP, sin embargo, ha basado su éxito en las provincias pequeñas, sobre todo del interior, con un perfil claramente conservador. Así, vemos como en las circunscripciones donde se elegían menos de 5 diputados, el PP ha ido consiguiendo uno o dos escaños más que el PSOE. Pese a que las propuestas del PP hacia esa España Vaciada han sido muy pobres, solo basadas en una rebaja de impuestos, las sociedades de estas provincias han entregado su voto mayoritario a ese partido. Esto ha pasado también en nuestra provincia, donde los resultados de la plataforma Soria Ya se han quedado lejos de sus expectativas. Lo mismo que Teruel Existe, cuyos pactos con el PSOE le han pasado factura, pese a ser una voz autorizada e influyente de toda la España Vaciada en el Parlamento. Madrid, el gran bastión del PP, también ha desvelado su techo electoral.