Loli Escribano

SIN RED

Loli Escribano

Periodista


Inteligencia natural

23/06/2023

Desde hace algunos meses, raro es el día en el que no leo o escucho alguna información relacionada con la inteligencia artificial. Por ejemplo, gracias a la inteligencia artificial, ahora ya podemos entender el acadio, una lengua que se escribió y se usó ampliamente en Mesopotamia y Oriente Próximo entre el 3.000 a.C. y el 100 d.C.  El acadio cuneiforme servía para que personas de distintas regiones pudieran comunicarse entre sí. Hasta ahora era difícil descifrarlo, porque no había casi traductores de acadio. Se han recuperado más de medio millón de textos acadios escritos en tablillas que empezarán a ser traducidos por la inteligencia artificial. Esas tablillas debían de ser para aquellas gentes de hace 5.000 años como para nosotros el WhatsApp. Estoy deseando saber qué mensajes se enviaban los ciudadanos de aquel Oriente Próximo. Me sorprendería que en alguna de esas tablillas pusiera algo así como «las mujeres son más beligerantes, porque carecen de pene». O que se leyera, «me ha hecho gracia», en contestación a otra tablilla en la que se aludiera a los nombres de los consejeros que los reyes de las dinastías mesopotámicas elegían para formar sus asambleas. 
Otra noticia que me ha encantado: Meta tiene un nuevo modelo de inteligencia artificial que aprende e imagina como los humanos. Ahí ya me surgen las dudas y me pregunto, ¿qué humanos? Porque si aprende como determinados especímenes, entonces no será tan inteligente como se le presupone. Y si sólo aprende como los que considera referentes, entonces, ¿la inteligencia estará siendo sectaria, elitista? Imagino a Meta aprendiendo como los electores que votan a los partidos que les perjudican abiertamente con el compromiso de destruir los avances y derechos logrados y me echo a temblar. También sería preocupante que aprendiera como los humanos que pertenecen a partidos que lo mismo pactan con Vox en El Burgo de Osma que con el PSOE en Navaleno. O como los humanos que igual militan en un partido de color naranja que luego en uno de color azul. 
Los expertos en inteligencia artificial ya alertan de que ésta pone en riesgo de extinción al ser humano. A la vista de lo que leemos y oímos en estos días, que son a la vez post y pre electorales, no vamos a necesitar que la inteligencia artificial nos extinga, somos capaces de hacerlo sin ninguna ayuda. Es evidente que hace tiempo que estamos en pleno proceso de pérdida de la inteligencia natural. Más o menos desde la época de Aznar cuando empezó a hablar con acento tejano en su visita a EEUU en 2003. Yo creo que ahí empezó el declive de la clase política que no deja de ser el reflejo de una sociedad cada vez más desmemoriada, más desinformada y menos crítica. Por tanto, el riesgo de que la inteligencia artificial nos extinga o nos suplante la identidad, en algunos casos, no será un peligro, sino una bendición.